Estudiar a través de internet es más accesible que nunca. Estudiar nunca ha sido más fácil ni ha estado tan disponible para aquellos que quieren aprender, desarrollar nuevas habilidades o incluso hacer los deberes de la escuela de una forma más dinámica. La penetración de internet, la llegada de los smartphones y la popularización del streaming han provocado una explosión de plataformas educativas con cursos que van desde las matemáticas básicas, idiomas o programación, hasta materias como filosofía, química o finanzas, pasando por aprender a tocar la guitarra o diseño de videojuegos. Su disponibilidad abre un mundo de posibilidades a sus usuarios.

No solo por la flexibilidad -estudiar a cualquier hora, desde cualquier lugar-, sino también por el precio. La llegada de los cursos online (MOOC) rebaja drásticamente los costos de un tutor personal de apoyo o de los estudios universitarios. Muchas de las universidades más prestigiosas del mundo ofrecen cursos y en algunos casos pueden expedir un certificado tras superar un examen por un precio reducido.

De hecho, el mercado de Educación Online no ha parado de crecer y los analistas de la consultora Aritzon creen que los ingresos de este sector alcanzarán solo en Latinoamérica casi US$2.700 millones el próximo año. Según el informe “Perspectivas del mercado de e-learning de Latinoamérica para 2018-2023”, los cursos de apoyo a la escuela; es decir, los dedicados a estudiantes de primaria y secundaria, son los más demandados. La preferencia apunta a cursos flexibles -que cada uno puede hacer a su ritmo- sobre los que necesitan un instructor. En Latinoamérica, siete de los principales países -entre ellos Brasil, México, Argentina, Bolivia y Uruguay- han adoptado sistemas de aprendizaje online. “Los gobiernos han jugado un papel clave en la llegada de las plataformas digitales de aprendizaje a América Latina”, dicen los expertos de Aritzon.

Para la firma Global Market Insights, los próximos avances tecnológicos aplicados a la educación están cada vez más cerca. Los analistas de la consultora creen que el siguiente paso será la incorporación de realidad aumentada al aprendizaje a través de internet y el uso de la nube para almacenar toda nuestra información. “Internet ha resultado ser la herramienta más efectiva, permitiendo un aprendizaje exitoso en varios segmentos de usuarios finales de una manera atractiva y rentable”.